jueves, 25 de julio de 2013

Cuentos infantiles, Cuento de La llave mágica

Cuento de La llave mágica
Martin era un niño que ya se habia hecho tan gran que aquel cumpleaños su padre le obsequio un libro ¡sin dibujos! El pobre niño quedo un escaso decepcionado pero al notarlo su padre le dijo - Este no es un libro cualquiera hijo es un libro mágico. Pero para encontrar su magia tendrás que leerlo. Eso estaba mejor porque a Martin le gustaban todas las cosas magicas asi que empezo a leer el libro aunque no tenia muchas ganas. A la mañana próximo su padre le pregunto - ¿has encontrado ya la llave mágica? ¡Así que tenía una llave!. Martín corrió a hojear el libro buscándola pero no había ni rastro. Volvió muy contrariado pero su padre le advirtió - Asi no la descubriras. Tienes que leer el libro. Pero Martín no tuvo mucha paciencia y dejó de leer pensando que su padre le había engañado para hacerle leer un escaso más como le había estado diciendo el profesor. Escaso despues su hermana Ángela solo un escaso menor que el le pidio el libro para tratar de leerlo ella. Tras varios dias esforzandose por leerlo sin demasiado fruto manifestó en el salon gritando loca de contenta - ¡La he encontrado he encontrado la llave del libro magico! -y entonces no paro de hablar de los mundos y espacios que habia visitado con aquella llave. Aquello termino por persuadir a Martin para regresar a leer el libro. Al comienzo era un rollo ni un triste dibujo pero escaso a escaso la historia se fuese animando empezo a interesarse por la vida de aquel principe aventurero y cuando quiso darse cuenta alli estaba. Era el propio libro el que tenia a sus ojos manera de llave y era realidad que en cuanto lo abria se sentia transportado a los valles y mares del libro y vivia las aventuras de sus piratas principes y hechiceros como si fuesera el mismo. Y su cabeza y sus sueños se llanaban de aventuras a la primera oportunidad. Pero lo mas especial de aquella historia fuese que a dividir de entonces en cada nuevo libro veia una nueva llave a mil mundos y aventuras y ya jamás dejo de viajar y viajar a traves de las letras y las palabras.

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